El envío de comida a domicilio supone un negocio que en España movió 1.140 millones de euros durante el 2016, un 7 % más que un año antes, lo cual contrasta con la tendencia a la baja del "take away", que cayeron en torno a un 1,6 %.
Así lo ha explicado el director ejecutivo de la compañía de investigación de mercados NPD España, Vicente Montesinos, cuyos datos apuntan no obstante a que el envío de comida a domicilio todavía supone apenas el 3,2 % de la facturación total de la restauración comercial.
De los más de 35.000 millones de euros de ingresos registrados el pasado año por este sector, el 80 % se generaron gracias al consumo dentro de los propios establecimientos y el 15,8 % por el "take away".
En opinión de Montesinos, la evolución a la baja de la recogida de pedidos en local es una "anomalía" que se registra en España en comparación con otros países occidentales, que se explica fundamentalmente por el elevado número de bares, cafeterías y restaurantes que existen en el país.
"También nos hemos hecho más cómodos", ha señalado para justificar por qué el consumidor prefiere cada vez más el envío a domicilio.
El peso "online", al alza
De los 1.140 millones de euros que mueve este último negocio, 545 millones ya proceden de los pedidos a través de Internet, de los cuáles el 63 % se realizaron a través de la web del establecimiento donde se compra y el restante 37 % mediante "agregadores" como Just Eat, Deliveroo, UBEReats, Aloha24 o Resto-in.
El precio medio de cada pedido de comida a domicilio en España se sitúa en 5,48 euros por persona, de acuerdo con sus cifras.
El estudio de NPD se ha dado a conocer hoy durante un acto celebrado en la sede de Just Eat en Madrid, durante el que la compañía ha revelado que desde que aterrizara en España, en 2010, ya ha generado a la economía del país en torno a 550 millones de euros.
La cifra ha sido aportada por su director en España, Jesús Rebollo, quien ha informado también de que ya ofrecen la posibilidad de recibir comida de unos 6.000 restaurantes repartidos por todo el país, con una cobertura del 95 % de la población.
La estrategia de Just Eat de cara a 2017 pasa por "convencer" a más restaurantes a que se sumen a esta plataforma, ya que calculan que existen más de 15.000 que envían comida a domicilio.
Just Eat, la líder
Su modelo se basa en facilitar a los restaurantes la gestión del pedido "online" a través de su web y su aplicación para el teléfono móvil, aunque del envío se encarga el propio establecimiento, al contrario que otras de las empresas del sector.
Aunque Just Eat también ofrece actualmente a cerca de un 5 % de los restaurantes colaboradores el servicio de envío -a través de alianzas con compañías de transporte-, Rebollo ha descartado que la firma vaya a apostar por esa vía.
Desde Just Eat no han aportado datos desagregados sobre su cifra de negocio en España ni sobre el número de pedidos, aunque a nivel global la compañía -presente en trece países- anunció esta semana que triplicó sus beneficios hasta superar los 80 millones de euros el pasado ejercicio.
La empresa adquirió hace un año al que hasta entonces era su principal competidor, La Nevera Roja, una operación que según la Comisión Nacional del Mercado de Competencia (CNMC) le permite controlar más del 70 % del mercado.
Just Eat también ha anunciado hoy un "reposicionamiento" de la marca que irá acompañado de un cambio en su logo y del lanzamiento de una campaña con una decena de vídeos promocionales en España.
