La eurodiputada Clara Aguilera, portavoz socialista de la Comisión de Agricultura de la Eurocámara, recordó que la guerra «ha agravado la falta de liquidez en el sector primario, que se encuentra en una situación ya delicada debido al aumento de los precios, en particular, de la energía, los fertilizantes y los piensos»
La ayuda acordada «ayudará a aliviar en parte esta situación», dijo Aguilera.
En particular, se trata de una medida financiada a través del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader), que permite a los Estados miembros que aun dispongan de fondos ofrecer liquidez a los agricultores (hasta 15.000 euros) y a las empresas agroalimentarias (hasta 100.000 euros).
Para poder distribuir esta ayuda, los países, que aun tengan ayudas económicas no gastadas en la actual programación, tendrán que modificar sus Programas de Desarrollo Rural para introducir esta nueva medida y seleccionar a los beneficiarios.

Estado del cultivo de remolacha la semana pasada en una parcela de Valladolid. Efeagro/ ACOR
Podrán movilizar hasta un 5 % de los fondos Feader para el periodo 2021 y 2022.
Esta ayuda se va a dirigir a los más afectados por la crisis actual y, en particular, a los que participen en la economía circular, la gestión de nutrientes, el uso eficiente de los recursos o métodos de producción respetuosos con el medio ambiente y el clima.
Se prevé que esta medida entre en vigor a partir del día de su publicación, en base a las solicitudes presentadas antes del 31 de marzo de 2023 y los pagos deberán abonarse antes del 15 de octubre de 2023.