El Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) expresó en un comunicado de prensa que durante la inauguración de la Conferencia de Bioeconomía y Bioenergía para Líderes Empresariales del Sector Agroalimentario de la Cámara, los expertos señalaron la necesidad de un modelo de desarrollo bioeconómico con el fin de aprovechar la base de infraestructura y tecnología disponible y recursos biológicos de manera sostenible.
“Hay una necesidad de comprender su uso y la importancia de aprovechar al máximo los recursos biológicos para ayudar a los territorios rurales a ser motor de desarrollo y a la reactivación socieconómica“, afirmó el gerente del Programa de Bioeconomía y Desarrollo Productivo del IICA, Hugo Chavarría.
El IICA y la Cámara cuentan con un convenio para reactivar el sector agroalimentario mediante la aplicación de un nuevo enfoque de actividades económicas y de proyectos de inversión en la agroindustria, en el que se comprometen a trabajar desde la perspectiva de la bioeconomía, los agronegocios, la innovación, el desarrollo territorial y la agricultura sostenible.
Oportunidades de negocio con residuos y desperdicios
Según Chavarría, el modelo “responde a las necesidades de desarrollo y permite aprovechar las oportunidades que ofrecen los residuos y los desperdicios, y en un escenario de crisis como el que vive actualmente el mundo por la pandemia de la COVID-19, se debe trabajar con modelos productivos basados en la bioeconomía para aprovechar al máximo los recursos biológicos”.

La bioeconomía pasa por la transformación de soja en bioenergía. Efeagro/ Santi Carneri
Las autoridades indicaron que para alcanzar esto, primero la región debe identificar las necesidades y oportunidades, así como desarrollar proyectos que eviten el desperdicio que actualmente se da en América Latina, que asciende a 127 millones de toneladas de alimentos.
Datos citados por el organismo revelan que en Latinoamérica se desperdicia el 20 % de cáscara de arroz, entre 60 % y 80 % de los desechos de café; otro 60 % de los residuos de caña; cerca del 50 % de las cáscaras de cítricos; cerca del 13 % de desperdicios de papa, un 40 % de los desechos de piña y suero de leche en un 70 %.
Industrializar la biomasa
Por su parte, el especialista internacional de biocombustibles del IICA, Agustin Torroba, comentó sobre las alternativas a la bioenergía y destacó las posibilidades de aprovechar e industrializar la biomasa y generar un mayor valor agregado en origen. La biomasa es fuente de abastecimiento continua, y para ello pueden usarse materias primas como la soja.
Los expertos indicaron que los países deben trabajar en un hoja de ruta para contar con marcos regulatorios, instrumentos de fomento y creación de mercados, estímulos financieros y fiscales y capacidades técnico-científicas para contar con profesionales en el desarrollo de los proyectos. EFEAGRO