Es el fruto de una operación internacional, denominada Opson III, en la que intervino la Guardia Civil. El director general del instituto armado, Arsenio Fernández de Mesa, ofrecía ayer estos datos en la inauguración en la sede central del cuerpo de unas jornadas para analizar la citada operación, en la que participan representantes de 38 países, de Europol y de Interpol, entre otros.
España participó en la Opson III, con cuatro ministerios implicados: Interior, Sanidad y Servicios Sociales, Agricultura y Hacienda.
Una operación que se inició en 2011 con la participación de 11 países y que ha ido incorporando a otros estados e incrementando la cifra de incautaciones y de detenidos en la lucha contra el fraude alimentario y en pro de la seguridad alimentaria.
Inspección y retirada
El pasado año, los países que participaron realizaron 8.660 inspecciones y se instruyeron 1.813 expedientes que conllevaron la retirada de la circulación de más de 5.661 toneladas de alimentos y 681.716 litros de bebidas.
Fernández de Mesa detalló los datos correspondientes a España, donde la Guardia Civil realizó 2.339 controles e inspecciones, instruyó 1.663 expedientes por distintas infracciones administrativas e intervino 500 toneladas de alimentos y 400.000 litros de bebidas.
Tiendas, mercados, aeropuertos, puertos y viviendas fueron los puntos en los que los agentes de la Guardia Civil realizaron las intervenciones. Si hubieran entrado en el marcado, resaltó el director general del instituto armado, podrían haber supuesto un “grave peligro” para los ciudadanos.