El director general de la Industria de la Alimentación y Bebidas (FIAB), Mauricio García de Quevedo,  compareció ayer ante la Comisión de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente de la Cámara Baja  y señaló entre los retos para la competitividad del sector la salida del Reino Unido de la Unión Europea y "la política arancelaria de EEUU hacia productos como la aceituna de mesa". A su juicio, medidas como estas ponen en peligro toda la filosofía de la Política Agraria Común (PAC): "Tenemos que ser contundentes para no ver alterado nuestra competitividad global".

García de Quevedo  avanzó que después de esta Comisión se pondrá en contacto independientemente con los grupos políticos para abordar las iniciativas que afectan al sector como la modificación de la venta a pérdidas o la ley de consumo de alcohol en menores.

Lucha contra los bulos y no a los impuestos a productos concretos

García de Quevedo aprovechó su alocución para pedir, además, la implicación de todos los grupos parlamentarios en la lucha contra la desinformación y los falsos mitos sobre la alimentación.

"Los bulos y los ataques injustificados al sector producen una alarma social injustificada y desprestigian a un sector estratégico que da empleo a más de medio millón de personas", indicó.

Por otra parte, consideró"imprescindible" adoptar medidas que promuevan la competitividad y la eficiencia del sector y que mejoren el funcionamiento de la cadena alimentaria. Esta cadena "permite el suministro de más de 120 millones de raciones de comida diarias". Tras recordar que es un sector que ha funcionado bien durante la crisis y que lleva quince años con crecimientos de dos dígitos en exportaciones, habló de fiscalidad, que es un "tema que está siempre sobre la mesa" y que según su opinión "debe ir unida a la realidad del país".

Cualquier cambio puede tener un "impacto importante" en "comercio, alimentación y turismo, que suponen el 20 % del Producto Interior Bruto (PIB)", añadió.

En este sentido, y preguntado sobre el impuesto a las bebidas azucaradas en Cataluña, abogó por conseguir mejorar la salud de los consumidores a través de educación en hábitos saludables más que a través de una tasa, un sistema que considera "discriminatorio, regresivo y que afecta a los más desfavorecidos". En su opinión, la caída en este tipo de productos que han señalado algunos informes en Cataluña, se puede extrapolar a todo el territorio nacional por la apuesta de la industria por las bebidas "light" o "cero", por lo que el peso de las azucaradas "año a año va bajando".

FIAB pide ahondar en la ley de cadena alimentaria

Respecto a la Ley de la cadena alimentaria, planteó que la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA) pueda "actuar jurídicamente y hacer públicas las sanciones que imponga". La venta a pérdidas es una "acción clara de competencia desleal y confusión al consumidor, que perjudica seriamente a la producción, a la industria y a la generación de empleo, sin un beneficio para el consumidor", ha afirmado.

Por otro lado, se refirió a la defensa de la Unidad de Mercado -es importante "evitar iniciativas legislativas de algunas autonomías que rompen esta unidad"- y al compromiso de la industria con el fomento de una dieta variada y equilibrada.

Desde FIAB, también ha reclamado a los grupos políticos el fomento de la innovación, más políticas de promoción agroalimentaria y medidas que garanticen el mismo tratamiento en cuestiones de calidad, seguridad e higiene a los productos europeos y a los importados de terceros países.

Otras comparecencias

Los portavoces de esta Comisión se comprometieron ayer a tratar de alcanzar una estrategia nacional contra el hambre y la malnutrición antes de la Cumbre Mundial Parlamentaria que se celebrará en octubre en España.  Respondió así a la demanda del representante especial de la FAO en España, Ignacio Trueba, quien  intervino en esta Comisión para informar de la celebración de esta cita, en la que espera que se alcancen "acuerdos importantes".

El objetivo, según Trueba, es constituir "una alianza mundial contra el hambre y la malnutrición" precisamente en España, donde no existe esta herramienta nacional como en otros países desde hace años o incluso en el ámbito europeo. "Sería interesante que hubiese un trabajo conjunto basado en una ética de mínimos y un consenso, y definir una alianza parlamentaria española", demandó. Incluso presentó una "hoja de ruta" para que se consiga este acuerdo en España antes de la cumbre, al que se ha comprometido todos los portavoces de los grupos presentes en la Comisión.

La situación del sector de la cerveza, en el Congreso

El director general Cerveceros de España, Jacobo Olalla, destalló en su alocución ante los diputados los datos de un sector que cuenta con 550 centros productores en España, genera 7.000 millones de valor añadido, se traduce en 344.000 empleos y transforma un millón de toneladas de cereales. Se mostró especialmente "orgulloso" de algunos datos como que el 90 % de la materia prima que se utiliza para producir cerveza es de origen local.

Subrayó, además, la apuesta por la sostenibilidad de las productoras cerveceras, tanto en los cultivos como en las industrias, muy vinculadas a aspectos medioambientales como la reducción del agua o la reutilización y reciclaje de empresas. Olalla señaló la relación directa entre el consumo de cerveza y el estado de salud de la hostelería, con el binomio "tapa-cerveza" como "elemento motivador" tanto para consumidores españoles y extranjeros.

Sobre los límites del patrocinio deportivo de empresas del sector dijo que siempre ha defendido estas actividades publicitarias con dos excepciones, que no se financian clubes de menores ni eventos deportivos de niños, y en los deportes de motor siempre se promocionan marcas sin alcohol.