Los territorios del vino apuntan hacia los chinos, japoneses y ciudadanos del Este de Europa para atraer nuevos visitantes. La rica gastronomía española juega a favor de un sector con enorme potencial.
El turismo ligado a la gastronomía y al vino tiene amplias posibilidades de crecimiento, según destacan los expertos, a tenor de los resultados positivos que están obteniendo algunos territorios. Es el caso de Cataluña, que en los últimos años ha experimentado un “boom” de visitantes rusos, que recorren bodegas y viñedos y realizan importantes compras.
Es el caso de Bodegas Torres, que precisamente tiene en los rusos entre sus principales visitantes, y los que más gastan en la adquisición de vinos o brandy que llevan como regalos a la vuelta de sus vacaciones. Aunque en este caso, el entorno monumental de un territorio considerado como “La Toscana” española, la cercanía de Barcelona y de la Costa Brava juegan en su favor.
Pero también China, Japón y Rusia son considerados como los “mercados emergentes” desde el Gobierno de La Rioja, que pretende proyectar el turismo vinculado al vino y a la gastronomía, dos de sus principales argumentos en este sector, según explica directora general de Turismo, Mónica Figuerola.
“A los mercados consolidados les ofrecemos las novedades y para los emergentes reservamos los productos que nos identifican como el enoturismo, en el que somos líderes”, detalla Figuerola a Efe. Bajo estas premisas, La Rioja participará en mayo de 2015 dentro de la Exposición Universal de Milán, con una estrategia y contenidos que Figuerola aún no quiere desvelar.
Mucho más que vino
El Camino de Santiago, el vino y la lengua española son los principales atractivos de una comunidad autónoma donde el turismo representa el 10,3 por ciento del PIB y uno de cada cuatro empleos está vinculado de una u otra forma a este sector.
Entre los visitantes tradicionales a La Rioja figuran los ciudadanos de Alemania, Francia, Reino Unido y Países Bajos. En muchos de los productos y servicios que ofrecen, La Rioja va de la mano con otras comunidades autónomas de similares características a La Rioja: de interior y con la cultura y gastronomía como principales valedores de su oferta turística.
Alianza “interautonómica” y Marca España “de interior”
Aragón, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Extremadura, Madrid y Navarra conforman el resto de territorios con los que La Rioja forma una especie de Marca España de Interior. La naturaleza, a partir de la estación de esquí de Valdezcaray y de varios espacios catalogados como Reserva de la Biosfera, son otros de los argumentos que esgrime La Rioja, alternativos pero complementarios a los ya consolidados de su vino y del idioma. EFEAGRO