La exposición de motivos que acompañaba a la reforma constitucional, subrayaba el decidido apoyo de las Cortes Españolas a “la incipiente institucionalización de la ciudadanía comunitaria”. Además, se recordaba el proceso previo que se inició el 24 de abril de ese año.
Con este cambio, se permitió a los ciudadanos comunitarios residentes en España poder presentarse como candidatos a las elecciones municipales.