Es para mí un verdadero placer felicitar a Efeagro en este 25 Aniversario y unirme a su celebración, ya que desde sus comienzos esta agencia de noticias ha llevado a cabo un excelente trabajo difundiendo los contenidos agrarios y contribuyendo a acercar una realidad tan apasionante y compleja como es la del sector agroalimentario al resto de la sociedad.
Sin duda, en estos últimos 25 años la empresa agraria y los agricultores y ganaderos han sufrido una importante transformación. Ya he perdido la cuenta de las sucesivas reformas de la PAC que hemos vivido, la última de ellas acaba de entrar en vigor y en Bruselas ya se está planteando reformarla de nuevo. A todas estas reformas nos hemos tenido que ir adaptando, no sin esfuerzo y buena prueba de ello es que en los últimos 25 años los activos agrarios se han reducido a la mitad.
Empleo y riqueza en los pueblos
Posiblemente, esta tendencia no haya tocado fondo y en los próximos años la tasa de población activa en agricultura se reduzca aún más, hasta acercarnos a los niveles de los países vecinos más industrializados. Es importante que en este proceso no se pierda de vista la necesidad de incorporar más activos jóvenes al sector y que esto se acompañe con un correcto dimensionamiento de las explotaciones para que puedan generar empleo y riqueza en nuestros pueblos.
En estos 25 años la empresa agraria se ha profesionalizado de manera más que reseñable. Los niveles de formación de empresarios y trabajadores han mejorado sustancialmente, así como las condiciones de higiene y seguridad en el trabajo. Se ha incrementado valor añadido a las producciones mediante las mejoras genéticas y las nuevas variedades adaptándonos a los gustos del consumidor; se ha incorporado tecnología que ahorra costes, mejora el medioambiente y aumenta las producciones y la calidad se ha convertido en la bandera del sector.

Campo de trigo. Foto: Ginés Mena
Nuestras exportaciones agroalimentarias se han desarrollado de forma espectacular en los últimos años, siendo el motor ineludible de la recuperación y consolidación del sector exportador europeo y del conjunto de la actividad económica del país.
Es evidente que nosotros sabemos producir. Ahora nos falta saber vender lo que producimos a un precio justo
Sin embargo, y a pesar de estos buenos datos, somos conscientes de que tenemos algunas deficiencias que como sector debemos mejorar. Evidentemente, la Política Agraria Común es el marco regulatorio en el que nos debemos mover y del que debemos saber aprovechar los importantes recursos que pone a nuestra disposición. Sin embargo, debe ser el mercado quien nos guíe. Es evidente que nosotros sabemos producir. Ahora nos falta saber vender lo que producimos a un precio justo, ni más ni menos.
En este sentido, debemos ser capaces de fortalecer nuestra posición negociadora, no solo frente a los demás operadores que actúan en la cadena de la formación del precio sino también frente a nuestros competidores, países con menor rigidez en materia regulatoria y de producción.
Más integración en el campo
En efecto, nuestro sector agrario se encuentra demasiado atomizado y muy poco organizado como para poder sentarse en las mesas de negociación en una posición cómoda, como hacen los demás operadores. En este punto me gustaría valorar el papel que están jugando las organizaciones interprofesionales en la vertebración del sector. A través de ellas se intenta mejorar la transparencia y la eficiencia de los mercados, promocionar los productos agrarios, mejorar la información a los consumidores y promover actuaciones que permitan adaptar oferta y demanda.
Por otra parte, desde ASAJA hemos auspiciado y aplaudido la Ley de la cadena Alimentaria, que trata de poner claridad y equilibrio en las relaciones entre los distintos actores y operadores, desde la producción hasta que el producto llega al ama de casa. Hemos apostado por un Código de Buena Práctica Comercial y por unos contratos obligatorios que aporten seguridad y transparencia a las relaciones comerciales, donde el entendimiento y la negociación deben imperar sobre la imposición y la indefensión.
Tenemos ante nosotros el reto de proporcionar alimentos a una población mundial creciente, con mayor nivel adquisitivo y con mayor demanda de alimentos
También somos partidarios de la concentración de la oferta. Apoyamos decididamente la Ley de Integración Cooperativa, que nos permita integrarnos en estructuras económicas que defiendan mejor nuestros precios y nuestra posición negociadora.
Los datos están a nuestro favor. Estamos preparados para producir la mejor calidad a precios asequibles y tenemos ante nosotros el reto de proporcionar alimentos a una población mundial creciente, con mayor nivel adquisitivo y con mayor demanda de alimentos. Es un reto no exento de dificultades. Pero también es grande nuestra ilusión por seguir siendo esa pieza esencial en el engranaje de la sociedad.
En este viaje no queremos estar solos. Necesitamos la complicidad de medios como EFEAGRO que con su buen hacer diario contribuye a difundir nuestro trabajo y darnos a conocer al resto de la sociedad. Estamos seguros de que el futuro nos vais a seguir acompañando. Muchas gracias y Feliz Aniversario