El ministro ha indicado que ya se han aplicado reducciones en las capturas y la postura "clara" de España es que "no se puede continuar por esa vía", según ha señalado este jueves en una entrevista en Herrera en COPE.
El sector, ha remarcado, sabe que la postura de la Comisión Europea es "muy firme" al respecto pero "tampoco le conviene que Italia, Francia y España -países concernidos en el asunto- se coloquen enfrente".
"Hay que buscar mecanismos de selectividad con los institutos científicos, el Instituto Oceanográfico y el CSIC para intentar que las capturas del Mediterráneo puedan ser más selectivas" y mantener la "rentabilidad" de los pescadores.

Para el ministro, es necesario defender los "stock biológicos" pero "también los stock de pescadores y mantener así ese equilibrio entre lo biológico y lo económico, que tan importante es".
Además, Planas sostiene que la "mortandad por pesca es un tema menor" y cree que "la polución, por ejemplo, es un problema mucho más importante" en el Mediterráneo.
Otras dos "grandes negociaciones" en el próximo consejo de ministros de Agricultura, Pesca y Alimentación será la relativa a la gestión de los caladeros compartidos con Reino Unido, tras el "brexit", especialmente interesante en poblaciones como la merluza norte, el rape, los gallos y el bacalao.

También la negociación sobre las aguas comunitarias, particularmente en lo referente a la pesca en el Atlántico Noreste con las cuotas en merluza sur a tener en cuenta.

Pesca en el Pacífico Occidental y Central

En materia de pesca, el Ministerio ha informado también en un comunicado de que la Comisión de Pesquerías del Pacífico Occidental y Central (Wcpfc, por sus siglas en inglés) ha concluido con la adopción de una nueva medida que garantiza a los barcos de la Unión Europea el uso de 403 días de pesca en alta mar.

Además, consolida la presencia de los cuatro atuneros españoles que operan en la zona, considerada la principal zona de captura de atún tropical.
La nueva medida de gestión adoptada en su 18ª reunión anual, celebrada por videoconferencia del 29 de noviembre hasta la madrugada del 7 de diciembre, será aplicable del 16 de febrero de 2022 al 15 de febrero de 2024.

Incluye otros aspectos técnicos para garantizar la sostenibilidad a largo plazo de los recursos pesqueros de patudo, rabil y listado, como son el empleo obligatorio de dispositivos de concentración de peces (DCP), no enmallantes, para proteger a mamíferos marinos, tortugas y aves, obligatorios a partir del 1 enero 2024. El número máximo de DCP activos por barco se fijan en 350.

De esta forma, los atuneros españoles que faenan en la zona, podrán alternar su actividad con la pesca en el área del Pacífico Oriental, gestionada por la Comisión Interamericana del Atún Tropical (CIAT); con la recogida en el acuerdo de la Unión Europea con Islas Cook, recientemente renovado; así como con la del acuerdo con Kiribati, cuya negociación está prevista que comience a principios de 2022.